Saltar al contenido

Descubre los imprescindibles: qué ver en Estocolmo en solo 48 horas

1. Visita al casco antiguo de Estocolmo

El casco antiguo de Estocolmo, conocido como Gamla Stan, es uno de los lugares más pintorescos de la ciudad. Con sus estrechas calles empedradas y coloridos edificios, es como adentrarse en un cuento de hadas. Aquí se encuentra el Palacio Real y la Catedral de Estocolmo, ambos con una arquitectura impresionante. Además, hay numerosas tiendas de artesanías y cafés para disfrutar de un momento de tranquilidad.

1.1. Recorrido por el Palacio Real de Estocolmo

El Palacio Real de Estocolmo, situado en el casco antiguo, es una visita obligada para los amantes de la historia y la arquitectura. Con más de 600 habitaciones, es una de las residencias reales más grandes del mundo que todavía está en uso. Durante el recorrido, se puede explorar la Capilla Real, los Salones de Estado y el Museo de Antigüedades Gustav III. Además, si tienes suerte, podrás presenciar el cambio de guardia, una ceremonia que se realiza a diario donde los guardias desfilan con sus uniformes tradicionales.

Recorrido por el Palacio Real de Estocolmo

El Palacio Real de Estocolmo, también conocido como Kungliga Slottet, es una de las principales atracciones turísticas de la ciudad. Construido en el siglo XVIII, este impresionante edificio alberga numerosas salas y exposiciones que permiten a los visitantes sumergirse en la historia y la cultura sueca.

Al recorrer el Palacio Real, los turistas pueden admirar la majestuosidad de sus salones, decorados con elegantes muebles y valiosas obras de arte. Además, es posible visitar las habitaciones reales, incluyendo la sala del trono y las estancias privadas de los monarcas suecos. También se puede explorar la famosa Armería, donde se exhiben armaduras, espadas y otras piezas históricas.

Salas y exposiciones del Palacio Real

Una de las principales atracciones del Palacio Real es el Tesoro Real, donde se exhiben las joyas y los objetos preciosos de la corona sueca. Aquí se pueden admirar coronas, cetros y otras piezas de gran valor histórico y artístico.

Otra visita obligada es el Museo de Antigüedades, que alberga una extensa colección de obras de arte, artefactos arqueológicos y objetos históricos. Los visitantes pueden aprender sobre la historia de Suecia a través de estas fascinantes exposiciones.

3. Exploración del Museo Vasa

El Museo Vasa es uno de los destinos más populares de Estocolmo y una visita obligada para los amantes de la historia y la cultura. Este museo alberga el famoso barco Vasa, que se hundió en su viaje inaugural en 1628 y fue rescatado en 1961, en excelente estado de conservación. El barco Vasa es uno de los pocos barcos del siglo XVII que se ha conservado hasta nuestros días, y su tamaño y elaborado diseño lo convierten en una joya única.

Al explorar el Museo Vasa, los visitantes podrán admirar de cerca el impresionante barco de guerra, así como una serie de exhibiciones interactivas que cuentan la historia de su construcción, hundimiento y recuperación. Además, el museo ofrece una visión fascinante de la vida en el siglo XVII, mostrando artefactos y objetos cotidianos encontrados dentro del barco.

Paseo por los jardines de Djurgarden

Los jardines de Djurgarden son uno de los lugares más bellos y tranquilos de Estocolmo, perfectos para dar un paseo y disfrutar de la naturaleza. Este extenso parque ofrece una gran variedad de espacios verdes, desde prados abiertos hasta bosques frondosos. Además, cuenta con numerosos senderos peatonales y bicicletas para que los visitantes puedan explorar a su propio ritmo.

Uno de los puntos destacados de los jardines de Djurgarden es su increíble diversidad de flora y fauna. Aquí se pueden encontrar más de 800 especies de plantas, así como una gran variedad de aves y otros animales. Para los amantes de la naturaleza, este es un lugar ideal para observar y fotografiar la vida silvestre.

5. Tour por el Museo ABBA

El Museo ABBA es una parada obligatoria para los amantes de la música pop y los fanáticos del grupo sueco. Ubicado en Estocolmo, este museo ofrece a los visitantes la oportunidad de sumergirse en la historia y el legado de ABBA. Aquí encontrarás una fascinante colección de trajes, discos de oro, fotografías y otros objetos relacionados con la banda.

Además, los visitantes pueden disfrutar de una experiencia interactiva única en el mundo del museo, donde podrán cantar y bailar junto con hologramas de los miembros de ABBA en el escenario. También se ofrecen proyecciones de conciertos y documentales sobre la banda, brindando a los visitantes la sensación de estar en un concierto de ABBA en vivo.

6. Cena en un restaurante típico sueco

Después de un día lleno de visitas y recorridos por Estocolmo, una excelente manera de terminar la jornada es disfrutando de una cena en un restaurante típico sueco. La gastronomía de Suecia es reconocida por sus platos tradicionales y su enfoque en ingredientes frescos y de alta calidad.

En un restaurante típico sueco, podrás degustar platos como el köttbullar, albóndigas con salsa de arándanos rojos, acompañadas de puré de papas y pepinillos encurtidos. Otro plato popular es el gravlax, salmón marinado con eneldo y servido con mostaza dulce.

Además de la deliciosa comida, estos restaurantes tienen una atmósfera acogedora y tradicional, con decoración rústica y música folclórica sueca de fondo. Podrás disfrutar de una experiencia auténtica mientras saboreas los sabores únicos de la cocina sueca.